2.9.06

Seguimos en la brecha



Bienvenidos a mi espacio sideral



Aunque poco a poco sea, seguimos en la brecha.
Dice el poema: 'caminante no hay camino, se hace camino al andar, ...'
Leo, en mi revoloteo de flor en flor, que no elige camino sino que lo inventa, dice alguien.
En la encrucijada me planteo posibilidades. Paso sueños y duermevelas, le doy vueltas y más vueltas. No se dar respuesta al por qué de mi elección. Se que elijo y salgo del atolladero.
Muchas cosas se han conducido más por seguir vías de negación. Recuerdo que decidía descartando lo que no quería. Se que me retiro si algo no me cuaja.
Si algo quiero me pregunto qué lo hace deseable. Aunque tengo prisa me detengo y me otorgo un tiempo de reflexión -lo consulto con la almohada-. No por ello diré que nunca tomo el camino equivocado. Si la erré, a veces me castigo con un golpe en la frente -¡seré!-; pero en corto o largo plazo me justifico y perdono, me perdono, mi equivoco, errar es de humanos.
Cada vez me voy desvelando, conociendo, descubro mis debilidades. A veces peco de tener la botella más medio llena. Encararlo en positivo tiene sus ventajas. Tienes más vientos a favor. Es posible que de tanto desearlo se confabulen los elementos a tu favor. Una compañera me decía que los dioses nos conceden nuestros deseos para mortificarnos. A veces pienso en ello, cuando vienen mal dadas. Hay momentos de hacer valoración de positivo y negativo y mirar el fiel de la balanza y para donde se decanta.


 

4 comentarios:

Art_Alegoría dijo...

Juicio Sumarísimo sólo el que nos realizamos nosotros mismos.

El indulto no nos lo concedemos.


Nos concedemos el olvido.


Aunque sea futil.


***


Art_Alegoría

Art_Alegoría dijo...

Juicio Sumarísimo.

No nos concedemos el Indulto.


Tan sólo, y en ocasiones, el Olvido.


***


art_alegoría

Anónimo dijo...

Creo que tus elucubraciones están más pensadas que las mías quizá por eso aceptas tus errores como algo verdaderamente humano? de eso también se aprende.

Gracias por tu comentario pero creo que empezaré a abrir las cajas, despacio, sin prisa y sin miedo.

Besos,

Anónimo dijo...

Lo mío es de todos…, tuyo es.
Momentos que se alargan en años, estados que nos ocupan para desocuparnos. Vivir sintiendo que oteo la vida solo por una ventana el resto esta cerrado con oscuros ladrillos que deseo romper, pero que siempre pospongo, para no hacer ruido, por miedo a tener más luz, por miedo a que me vean, por miedo a ver más aun de aquello que no me gusta…
Como bien dices, probar, degustar, y pasar a la siguiente. Nada, al menos a mi me calma. Me obligo a engañarme y lo consigo, pero a veces la conciencia me zarandea y se acabo todo.
Gracias por tu visita. Siempre que quieras.